Junio 3, 2023

Jordan Peterson: una lectura imprescindible para descifrar la arremetida cultural republicana. Por Jorge Ramírez R.

Cientista Político. Libertad y Desarrollo

Peterson es uno de los exponentes más relevantes del pensamiento conservador contemporáneo. Se desempeñó como profesor de las universidades de Harvard y Toronto y tras grabar sus cátedras sobre psicología social y subirlas a Youtube, sus lecciones comenzaron a transformarse en un fenómeno cultural, en el seno de universidades norteamericanas donde las ideas de la corrección política, espacios protegidos y la cultura de la cancelación arremetían con fuerza.


El triunfo del Partido Republicano en la pasada elección del 7 de mayo no parece ser únicamente un accidente electoral. Es cierto, detrás del voto republicano hay una señal de protesta en contra de la administración Boric y se suma una expresión de hastío ante la clase política, pero también existe un voto identitario.

Un clamor de una derecha que, cansada de la subordinación cultural a las ideas progresistas, reaccionó. Es en este último ámbito donde la lectura del psicólogo clínico y crítico cultural canadiense Jordan Peterson emerge como una referencia intelectual clave para adentrarse en esta arremetida cultural neoconservadora.

¿Quién es Jordan Peterson? Peterson es uno de los exponentes más relevantes del pensamiento conservador contemporáneo. Se desempeñó como profesor de las universidades de Harvard y Toronto y tras grabar sus cátedras sobre psicología social y subirlas a Youtube, sus lecciones comenzaron a transformarse en un fenómeno cultural, en el seno de universidades norteamericanas donde las ideas de la corrección política, espacios protegidos y la cultura de la cancelación arremetían con fuerza.

Peterson es un pensador contracultural, un “atrevido”. Ese rasgo distintivo lo llevó a transformarse en una suerte de ícono pop-intelectual de los grupos opositores a la cultura progre o woke.

Una segunda clave que explica el éxito de Peterson es su capacidad de adaptación a la revolución tecnológica. No es el típico intelectual que escribe papers y se encapsula en un claustro académico. Es un divulgador, pero un divulgador que navega como pocos en las aguas de las redes sociales. Sin ir más lejos, su libro que hoy ha adquirido el status de best seller mundial 12 reglas para vivir: un antídoto al caos, surge a partir de los posteos que Peterson dejaba en el foro digital de preguntas y respuestas Quora.

Los posteos de Peterson alcanzaron tan nivel de alcance que las editoriales le propusieron desarrollar estas ideas en un libro de acceso universal: 12 reglas para vivir… Un texto que cuesta adquirir en muchas de las librerías de Santiago, porque en la mayoría de ellas se encuentra agotado y que incluso venden en las calles y cunetas de nuestra capital.

Muchos, equivocadamente catalogan el contenido de Peterson dentro de la categoría residual “auto ayuda”: craso error. Esa quizás ha sido la principal habilidad de Peterson: solapar un contenido moral con densidad intelectual bastante influida por la moral cristiana y el pensamiento conservador, en un fenómeno masivo y atractivo para un público universal. Su canal de Youtube tiene casi 7 millones de seguidores e incluso piezas de sus charlas son boom en Tiktok e Instagram.

A continuación, se exponen cinco ideas que conectan la reflexión de Peterson con la arremetida cultural contestataria al progresismo.

  1. Las jerarquías y desigualdades no son un constructo social. Referencias intelectuales del progresismo, desde Rousseau en adelante, pasando por Marx, han instalado la idea de que las desigualdades responden a la voluntad de agentes que determinan un ordenamiento social. Peterson refuta esa idea empleando un ingenioso, pero no por eso menos brillante ejemplo: las langostas. El autor describe con erudición cómo estos crustáceos desarrollaron hace 500 millones de años un complejo sistema de diferenciación, competencia, status, selección y jerarquía donde al igual que en la sociedades humanas prima el principio de distribución desigual. Entonces, la izquierda habría construido un hombre de pájaro al asociar la idea de desigualdad, selección y competencia con el capitalismo, cuando estas nociones no son fruto de él, sino que son parte de nuestra naturaleza. Basta estudiar a las langostas. “Las jerarquías de dominación son más antiguas que los árboles” dirá Peterson.
  1. La idea de orden vs caos. El pensamiento conservador siempre ha defendido la idea de orden. Sin orden, incluso no hay libertad. Locke en su Segundo tratado sobre el Gobierno Civil nos enseñó que el hombre cede parte de sus libertades naturales para acceder a un conjunto más amplio de libertades civiles. Peterson nuevamente reivindicará la idea de orden versus la noción de caos: “el caos es libertad, una libertad espantosa, es cierto”. El caos es la anomia, la ausencia de normas: “el caos es donde estamos cuando no sabemos donde estamos y lo que hacemos cuando no sabemos qué estamos haciendo”. El orden, es por contrario, el territorio explorado, es la certeza, es la tribu, la casa, el hogar, la religión, la familia y el país. La “grandeza de la tradición” señala Peterson. El orden, es la idea de patria, “es la bandera del país” nos dirá el autor canadiense., la misma bandera que fue deshonrada en el peak octubrista en esa bizarra perfomance apruebista de Valparaiso. En el imaginario social, post octubrista, indudablemente que la pulsión de restauración del orden existió. Los chilenos demandan orden, cada vez más. Peterson ofrece una reflexión documentada e interesante para entender cómo los sujetos transitan permanentemente en esa dualidad orden/caos.
  1. Compararse con uno mismo, no con el otro como antídoto al resentimiento. Peterson da inicio a esta reflexión dando cuenta de una cruda realidad: siempre habrá alguien que es mejor que uno. Si cada estudiante de física únicamente se comparara con Elon Musk, el resultado sería siempre el mismo: frustración. En lugar de centrarnos en por qué no somos como los mejores, debiéramos enfocarnos en constatar por qué no somos mejores que nosotros mismos, respecto del día anterior. En lo político, comparar a Chile con países escandinavos, OCDE y desarrollados se transformó en un lugar común para alterar las reales percepciones de la ciudadanía. La métrica respecto de la desigualdad es un muy buen ejemplo. En lugar de reconocer que en los últimos 30 años nuestro país había reducido los niveles de pobreza desde un 68% a un 8,6%, primó durante el estallido social la consigna de que Chile es el país más desigual del mundo (dato falaz, por cierto). Peterson tiene razón, un mal patrón de comparación produce no sólo frustración, sino que también resentimiento. Mucha de la rabia expresada en el estallido social, tuvo como origen esa tóxica idea de desconocer todos los avances que nosotros mismos habíamos experimentado como país. Paradójicamente, en el plebiscito constitucional de salida y en las pasadas elecciones del 7 de mayo, las comparaciones con países escandinavos desaparecieron. Los chilenos en su fuero interno se preguntaron ¿qué país era mejor? ¿el Chile pre estallido o el Chile post estallido? A la luz de los resultados electorales, la respuesta que primó está a la vista. Volvimos a compararnos con nosotros mismos.
  1. Confrontar la fragilidad. Deja en paz a los niños que anden en patineta. La mala crianza produce resultados individuales y sociales desastrosos. Pensar que tus hijos son sólo tus amigos y que únicamente requieren afecto conducirá a una relación en la cual cada vez se tornará más difícil decirles que no y eso sólo llevará a mal acostumbrarlos a un modo de ser de extrema fragilidad. Si dejas a los chicos andar en patineta aprenderán que las caídas, fracturas y heridas son parte del crecimiento y el aprendizaje; forjan carácter. Hoy, la cultura progresista promueve un modelo de ciudadanía centrado en la victimización y la fragilidad, la sobre protección, la activación de políticas de acción afirmativa para grupos que experimentan múltiples niveles de menoscabo (enfoque de interseccionalidad) y la cancelación de discursos que ofenden subjetividades. Peterson se rebela a esta idea de ciudadanía frágil.
  1. Antes de cambiar el mundo, ordena tu habitación. En la vida, pero también en la política, estamos llenos de pequeños arrogantes que pontifican sobre asuntos y objetivos que ni siquiera ellos han sido capaces de alcanzar. Quien no puede lo menos, difícilmente podrá lo más. Si no ordenas tu habitación, difícilmente podrás estructurar un nuevo ordenamiento social. La responsabilidad individual antecede a la colectiva. Esta idea es tremendamente predominante dentro del electorado de derecha. Es fácil hablar de elevar impuestos cuando nunca has producido riqueza, es cómodo imponer alzas al salario mínimo cuando nunca has dado trabajo y es fácil convocar a manifestaciones y protestas cuando no eres tú al que se le dificulta ir a trabajar a raíz de aquello. Nos gobierna un grupo generacional que saltó de las protestas estudiantiles a La Moneda; la pregunta es: antes de marchar ¿habrán ordenado su habitación?

Para seguir leyendo columnas de Ex-Ante, clic aquí.

Publicaciones relacionadas

Ex-Ante

Octubre 22, 2024

Prueba de noticia con notas relacionadas

Con citas del ex Presidente Sebastián Piñera apelando a la unidad y con una intervención de Cecilia Morel, recordando el anhelo de él de una alianza amplia, desde Chile Vamos a Demócratas, Amarillos y el PDG, la noche de este miércoles se homenajeó a Piñera a un mes de su muerte.

Marcelo Soto

Marzo 7, 2024

Crónica: En su discurso más emotivo y político, Cecilia Morel habla de unidad de Chile Vamos a Amarillos

Con citas del ex Presidente Sebastián Piñera apelando a la unidad y con una intervención de Cecilia Morel, recordando el anhelo de él de una alianza amplia, desde Chile Vamos a Demócratas, Amarillos y el PDG, la noche de este miércoles se homenajeó a Piñera a un mes de su muerte.

Alexandra Chechilnitzky

Marzo 6, 2024

El enojo del Gobierno con el FA por impulsar comisión investigadora sobre incendios en Región de Valparaíso

Diputados del Frente Amplio anuncia comisión investigadora por incendios.

Un grupo de diputados del Frente Amplio anunció este martes la creación de una comisión investigadora para determinar responsabilidades en los incendios del 2 y 3 de febrero en la Región de Valparaíso. En el conglomerado oficialista apuntaron al Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), dependiente del Ministerio del Interior, y apostaron […]