A pesar de los llamados de La Moneda y las advertencias del candidato presidencial Sebastián Sichel para que sus parlamentarios rechacen la reforma de un cuarto retiro de ahorros previsionales, es altamente probable que la Comisión de Constitución apruebe en general el proyecto con votos oficialistas. Detrás hay una estrategia que ha comenzado a cobrar fuerza entre legisladores de la coalición gubernamental.
Votación simbólica. A partir de las 15:00 horas de este miércoles está citada la Comisión de Constitución de la Cámara para votar “la idea de legislar” (también llamada votación o discusión “en general”) sobre un nuevo retiro desde los fondos de pensiones.
- La aprobación en general es solo una votación formal (la Comisión acepta iniciar la discusión del proyecto), sin embargo, según temen en el Gobierno y pronostican fuentes de Chile Vamos, podría convertirse en una señal política a favor del retiro, que podría confundir aún más el debate.
- Además, según admiten fuentes de RN y la UDI, los diputados que van a la reelección están enfrentando una fuerte presión de sus electores, pymes y sectores medios para aprobar la iniciativa.
- En el Gobierno están preocupados por este escenario, ya que podría abrir una presión social y mediática, que hasta el momento estaba contenida, para avanzar en un nuevo retiro o, incluso, en un giro total de los fondos.
- A juicio de autoridades del Ejecutivo esa medida sería grave para la economía y la red de protección previsional.
Proyectos mezclados. El problema se torna más complejo porque la Cámara decidió fusionar seis mociones que permitían un nuevo retiro, pero con objetivos distintos. Al aprobar la idea de legislar se daría luz verde a tres tipos de iniciativas:
- Algunos proyectos solo buscan facilitar un nuevo giro del 10% de los ahorros, tal como fueron las tres reformas anteriores.
- Otras iniciativas, como las que presentaron Jorge Durán (RN) y Pamela Jiles (humanista), facultan a los cotizantes o pensionados para disponer libremente del 100% de los fondos.
- Sin embargo, también había una moción del diputado Jorge Alessandri (UDI), que si bien permite disponer de la totalidad de los ahorros, propone que se redestinen a otros instrumentos de inversión y que queden bajo propiedad de los cotizantes o pensionados.
- “Hoy la votación, tal como está, es muy confusa para la ciudadanía, porque están todos los proyectos fusionados, pero es completamente incompatible apoyar el 10% y a la vez el 100%. Y cuando la ciudadanía vea que se aprobó en general, va a creer que el cuarto retiro va avanzando”, dice Alessandri, quien precisó que su proyecto es muy distinto al que presentaron Jiles y Durán.
- Alessandri, quien forma parte de la Comisión de Constitución, sostiene que pedirá separar la votación, ya que personalmente votará a favor de la idea de legislar de su moción. Si no se separan, cree, “esta votación en general será a favor mayoritariamente”.
¿Por qué el 100%? La idea de Alessandri cuenta con una simpatía en la UDI y también de otros sectores de Chile Vamos, porque, según ha dicho, busca evitar que los fondos previsionales sean expropiados o “nacionalizados” en un futuro gobierno.
- Incluso, desde el presidente del gremialismo, Javier Macaya, hasta su antecesora, la senadora Jacqueline van Rysselberghe, han dado señales a favor de esa moción, porque sintoniza, además, con un principio -defendido por la derecha- de que los fondos previsionales son propiedad de los trabajadores.
- El senador Iván Moreira, que ha apoyado consistentemente los retiros, dijo el 11 de agosto, en Chilevisión, que si la próxima elección la ganaba Gabriel Boric inmediatamente aprobaría la reforma. “Yo voy a votar por el 100% de los retiros”, dijo.
- Una idea que ha comenzado a cobrar fuerza en Chile Vamos es que la Cámara de Diputados rechace un nuevo retiro del 10%, pero que, a cambio, apruebe disponer del 100% de los ahorros, asegurando la inversión y la propiedad personal de los fondos.
- Aunque al Gobierno no le gusta esa estrategia, ya que abre una ventana riesgosa para la economía, algunos en el oficialismo creen que en el Senado la reforma podría quedar archivada, como una garantía, para impedir cualquier intento de expropiación de los ahorros previsionales.