La figura de Pamela Jiles volvió a impactar al FA: el apoyo de su pareja Pablo Maltés a la candidata a gobernadora metropolitana del FA Karina Oliva dividió al conglomerado al punto que enfrentó a la misma Oliva con el candidato presidencial Gabriel Boric. La pugna fue solo la punta del iceberg: la jugada de Oliva molestó internamente, pues algunos estiman que son más los costos que los beneficios que tener el apoyo del entorno de Jiles.
Qué observar: El viernes Oliva recibió públicamente el apoyo de Maltés para la 2da vuelta (sacó solo 10,68% de los votos), lo que generó de inmediato ruido interno en el FA, que se transformó en un enfrentamiento público una vez que Boric lo hizo patente al criticar públicamente a Oliva.
- Los resquemores obedecieron al estilo de política-farándula de Jiles -el que Boric ha cuestionado duramente-, aunque también están cruzados por que la diputada se ha dedicado a atacar duramente al FA desde que se fue de este, con Boric entre sus principales blancos.
- Ese día en la noche, Boric tuiteó: “Maltés/Jiles son todo lo q no queremos en política. Yo no aceptaría su apoyo ni por 1 millón de votos. Pero nadie está exento de errores, es cuando más se aprende”, agregando que le había manifestado a Oliva su desacuerdo, y ratificando que la apoyaba.
- No pasó desapercibido la dura frase de “ni por un millón de votos”, parafraseando a Frei Montalva.
- Tras una respuesta más cauta el sábado, hoy Oliva arremetió contra Boric: “Uno no puede actuar con la soberbia de decir que no lo acepto ni por un millón de votos. Más bien tiene que ver con el debate personal y yo ahí no voy a caer”, en alusión a las diferencias Boric-Jiles.
Karina Oliva, al recibir el viernes el apoyo de Pablo Maltés. Foto: Agencia Uno
Por qué importa: Lo que inquietó en amplios sectores del FA es el costo con el electorado frenteamplista que le pueda traer a Oliva el apoyo de Maltés -afirman fuentes de la coalición-, producto de la farandulización de la política con la que él y Jiles han operado. Y se sumó que la quitada de piso de Boric estaba dejando en redes sociales la sensación de que él ya no respaldaba a Oliva, por lo que se activó una ofensiva de respaldo a ella para despejar ese ruido.
- Lo que parlamentarios FA advertían es que una foto con Maltés no necesariamente iba a endosar sus votos, pero sí podía hacer que Oliva perdiera votos del mundo FA, tanto por el controvertido estilo de Jiles como por un enfrentamiento que tuvo Maltés con disidencias sexuales en Twitter.
- Pero ante el revuelo que produjo el tuit de Boric, la mesa nacional concordó el fin de semana salir a despejar el tema: en redes sociales, la sensación era que parte del FA estaba dejando a caer a Oliva.
- Así, Boric salió a tuitear anoche una foto haciendo campaña por Oliva: “En una coalición se pueden tener diferencias, pero deben procesarse con respeto. Tenemos muchas más cosas que nos unen”.
Qué significa: La figura de Jiles otra vez volvió a impactar al FA: ahora dividiéndolo. Comunes, el partido de Oliva, debió salir a aclarar que no había alianza política con Jiles, producto de la molestia interna. Y Comunes tampoco agradó que la candidatura de Oliva se enredara producto de los dichos de Boric. Ambos hechos se abordaron en la mesa nacional, con un diseño para dejar atrás el impasse.
- El viernes, el presidente de Comunes Jorge Ramírez debió aclarar en Twitter que el apoyo de Maltés “no significa acuerdo alguno en términos electorales”, y que entendía que “alcanzar las más amplias mayorías puede generar ruidos y críticas”.
- Su tuit salió incluso antes que el de Boric: el ruido interno ya era patente, y 3 diputados RD (Giorgio Jackson, Miguel Crispi y Marcela Sandoval) retuitearon a Boric. Y en Convergencia Social, la diputada Gael Yeomans también lo consideró un error.
- E incluso en Comunes, la expresidenta de la FECh Emilia Schneider calificó de “un desacierto” el apoyo de Maltés, aunque defendió a Oliva de las críticas.
- Ramírez, por su parte, retuiteaba a dirigentes que reclamaban porque el Frente Amplio se enredara por el apoyo de Maltés justo tras su éxito electoral en constituyentes y alcaldes.
- Finalmente la mesa FA concordó que la salida fuese reforzar que no había ninguna alianza política y el blindaje a Oliva, para dejar atrás la controversia.
Ojo con: La controversia afecta a Oliva justo cuando su contendor había logrado en la última semana contratacar con 4 hitos, ante la inquietud en la centroizquierda por la opción de que el DC sea derrotado.
- Las denuncias de violencia intrafamiliar que existen contra el concejal de La Pintana Rubén Urrutia, que hizo campaña con Oliva. Orrego le consultó en un debate por que no lo había pasado antes al Tribunal Supremo, y tras contestar ese día que no estaba al tanto antes, el viernes admitió que si había conocido las denuncias pero que el comité electoral del partido “verificó que no había antecedentes”. “Yo debiese haber perseguido con más contundencia”, agregó.
- Su vínculo con la candidatura presidencial de Marcel Claude y haber integrado el MAS, partido de Alejandro Navarro. Se lo hizo ver en Twitter el mismo Orrego, a partir de los emplazamientos de Oliva a que él representa un proyecto de la política tradicional.
- Presencia en debates: desde el comando de Orrego han acusado que Oliva no ha querido participar de algunos, pero sus equipos exponen que sí ha asistido a otros, y que ha privilegiado el terreno.
- San Ramón: la emplazó por el hecho de que el candidato a alcalde del FA no firmara el requerimiento para impugnar el triunfo de Miguel Ángel Aguilera.