La Moneda y los senadores de la oposición tomaron este sábado decisiones que parecen haber dejado en punto muerto las tratativas sobre un acuerdo. Por un lado el Presidente se reunió con parlamentarios de Chile Vamos, donde delineó un nuevo proyecto de tercer retiro y reiteró que acudirá al TC para frenar el aprobado en el Congreso. Por otro, los senadores insistieron en su exigencia de que no vaya al TC. Sin embargo, las posibilidades de un acuerdo podrían avanzar una vez que el gobierno presente su nuevo proyecto.
Qué sucedió: Este sábado se realizaron reuniones entre el presidente y líderes de Chile Vamos en la Cámara y el Senado en La Moneda y un encuentro paralelo por zoom de los senadores opositores.
- El Presidente les dio algunos lineamientos del nuevo proyecto de tercer retiro de fondos de pensiones, que consistiría entre otras medidas en inyectar recursos para ir en ayuda de los tres millones de personas que agotaron sus fondos de las AFP, de acuerdo a parlamentarios que participaron de la reunión. Piñera, en todo caso, no fue muy específico en los detalles.
- Por su parte, los senadores de oposición, liderados por la presidenta de la Cámara Alta, Yasna Provoste, lanzaron un comunicado con fuertes críticas al gobierno y reiteraron su exigencia de que no puede haber diálogo sin retirar el requerimiento ante el TC contra el proyecto aprobado por una mayoría superior a dos tercios en ambas Cámaras (con amplia votación favorable por parte de parlamentarios oficialistas).
- “El tercer retiro ya fue aprobado por el Congreso Nacional. A continuación de la promulgación de esta ley, podremos iniciar un nuevo dialogo, de cara al país, para emprender las reformas más urgentes que permitan resolver los problemas de una forma oportuna y suficiente”, dice el comunicado de Provoste, emitido tras la reunión con los senadores.
- “Cuando el proyecto ya se encuentra totalmente aprobado, el Presidente de la República mandata a sus ministros a proponer un cuarto proyecto de retiros, lo que hasta hace pocas horas declaraba como imposible”.
- Vale decir: para la oposición -en términos retóricos- el nuevo proyecto de Piñera implicaría un cuarto retiro.
Lo que hay detrás: Tomadas al pie de la letra las iniciativas de Piñera y las palabras del comunicado dan a entender que las tratativas se estancaron. ¿Cuáles son las posibilidades de avanzar?
- El proyecto de tercer retiro del Presidente está diseñado para que sea aprobado por la gran mayoría de los parlamentarios, de oposición y gobierno, dado que se estima que no sería viable que se opusieran a una iniciativa que beneficiaría a la inmensa mayoría de los chilenos. Por eso, la oposición lo califica como un “cuarto retiro”.
- Al mismo tiempo, se da por seguro que el Tribunal Constitucional admitirá a trámite el requerimiento del gobierno, el martes de la próxima semana. De acuerdo a fuentes del TC, el veredicto saldrá como máximo el 6 de mayo, 10 días antes de las elecciones del 15 y 16 mayo, donde se elegirán convencionales, gobernadores, alcaldes y concejales.
- Si bien el Presidente puede presentar antes del veredicto una solicitud de desestimiento de su iniciativa ante el TC, que una vez admitida necesitaría la aprobación de la contraparte (Cámara y Senado) para materializarse, se considera casi imposible que acceda a dar ese paso. La oposición quedaría entonces ante la disyuntiva de perder la oportunidad de lograr un amplio acuerdo o seguir adelante. Otras voces, sin embargo, advierten que el proceso electoral no asegura un curso expedito en las tratativas.
- Como en las negociaciones están en juego intereses no solo del gobierno, sino también de los sectores de la ex-Concertación, los más optimistas estiman que pese a ese obstáculo se podrían avanzar en las conversaciones, que incluyen demandas como una mayor carga tributaria para los sectores de más recursos con la finalidad de financiar gasto social y poner freno a iniciativas de la izquierda más dura que se saltan los cauces institucionales.
- En la centroizquierda ven con extrema preocupación el crecimiento de la candidatura de Pamela Jiles y de Daniel Jadue (PC), que hoy superan por amplio margen a todos los candidatos de la ex-Concertación. Mostrar capacidad de llegar a acuerdos que beneficien a la inmensa mayoría de los chilenos y permitan evitar que los planteamientos de la extrema izquierda encuentre mayor apoyo es un objetivo estratégico con miras a las elecciones de mayo y a las presidenciales.
- El Presidente Piñera, por su parte, está enfrentando su peor crisis desde las semanas posteriores al estallido social tras su contundente derrota en la Cámara y en el Senado y requiere mostrar resultados.
Ojo con: La primera mención a que el gobierno estaba abierto a una reforma tributaria la realizó Piñera -en términos muy generales- al dar a conocer su fallido proyecto alternativo de ayudas económicas para frenar el tercer retiro. A esa altura el gobierno ya sabía que iba a sufrir una fuerte derrota en el Congreso. Hoy se interpreta como una forma de abrir la puerta a las negociaciones con la oposición.