El doctor en sociología Alexis Cortés —representante del PC en la Comisión Experta— publicó el año pasado el libro “Chile, el fin del mito”, donde reflexionó sobre el 18-O, la pandemia y lo que llamó la “ruptura constituyente”. Sobre los saqueos y ataques incendiarios ocurridos desde el estallido social, se preguntó: “¿Qué se podía esperar si los intentos de reforma del sistema en buena parte han naufragado una y otra vez?”. En el texto, escrito antes del plebiscito de septiembre, planteó que la nueva Constitución y el gobierno de Boric serían claves para “refundar” el sistema.
Qué observar. El sociólogo de la U. Católica y doctor en esta disciplina por la Universidad Estadual de Río de Janeiro, Alexis Cortés, fue ratificado en enero por la Cámara como representante del Partido Comunista en la Comisión Experta.
- La instancia de 24 miembros deberá elaborar el anteproyecto constitucional. Una vez que la propuesta del Consejo Constitucional —elegido por votación popular— esté redactada, deberá emitir también un informe con recomendaciones de mejora antes de que sea sometida a plebiscito.
- Cortés es profesor del departamento de sociología de la U. Alberto Hurtado desde 2014, donde fue director del magíster de esa carrera.
- En su reseña biográfica destacó que fue vicepresidente del colegio de sociólogos entre 2018 y 2020 y que en 2021 integró el equipo de estrategia de la campaña presidencial de Gabriel Boric.
- Es autor de libros en portugués y español. En 2018 publicó “Favelados e pobladores nas ciências sociais: a construção teórica de um movimento social”.
- El año pasado publicó con Ril Editores “Chile, el fin del mito. Estallido, pandemia y ruptura constituyente” donde, en una serie de ensayos revisados, reflexionó sobre Chile antes y después del 18-O.
- En el libro de 148 páginas impreso en mayo de 2022, es decir antes del rechazo de la propuesta constitucional en el plebiscito del 4 de septiembre, incluyó una reflexión sobre el impacto del acuerdo del 15-N en el proceso constitucional. “Si bien es cierto que el plebiscito fue el resultado del acuerdo del 15 de noviembre de 2019 entre el gobierno y la mayor de la oposición de centro-izquierda, quienes buscaban darle una salida institucional a la crisis que desató el 18-O, sería equívoco atribuirle exclusivamente a ese acuerdo esta victoria”, dijo en la página 127.
- También incluyó apartados sobre la violencia en el 18-O, la que describió como racional, enfocada en los “símbolos del abuso” y se preguntó: “¿Qué se podía esperar si los intentos de reforma del sistema en buena parte han naufragado una y otra vez?”.
- A continuación, los párrafos que escribió sobre la materia.
La novedad de la violencia del 18-O. En el capítulo “La rebelión social como imaginación sociológica colectiva”, publicado inicialmente en noviembre de 2019 en los Cuadernos de Teoría Social, Cortés incluyó el subtítulo “Violencia y criminalización”.
- La pregunta. “Ahora bien, ¿cómo entender la violencia, los saqueos y el vandalismo del que hemos sido testigos? Su presencia no es novedad, lo que parece ser distinto es su magnitud y el que los repertorios recurrentes de desacreditación de este tipo de manifestaciones no han parecido surtir los efectos habituales”, escribió en la página 73.
- “El principal es la asociación de la protesta a la turba descontrolada, con lo que se pretende despolitizarla, reduciéndola a una cuestión de orden público que provocaría el rechazo generalizado de la población”.
- “Muchos manifestantes que, aunque aclaran haber participado pacíficamente y lamentan las consecuencias negativas de las manifestaciones más violentas, reconocen que, sin ellas, no habrían sido escuchados: ‘Una marcha pacífica, no te van a pescar. Tenís (SIC) que romper para que te hagan caso. ¿Por qué hicieron caso los gobiernos? El gobierno empezando a sacar leyes. ¿Por qué? Porque estaba el destrozo, si no hay destrozo, no te pescan’, declaraba un hombre a rostro descubierto a un medio internacional”.
- “Energía acumulada”. “Aunque después del 2011 se han abierto brechas que han permitido ampliar el espectro político para representar intereses derivados de la movilización social, los candados que exhibe la institucionalidad política oxidan su capacidad para dar respuesta a las demandas sociales. En este sentido, el Tribunal Constitucional ha inutilizado las mayorías parlamentarias para reformas sociales”.
- “Otras formas de canalización del descontento como los sindicatos han sido debilitados a tal punto que dan la impresión de que no hay vías para que el malestar se exprese institucionalmente con capacidad transformativa. Pero esa energía acumulada en algún momento emerge con fuerza avasalladora”.
- Los ataques dirigidos. “Nos guste o no, esa violencia tiene su racionalidad. Y James Scott es uno de los investigadores que ha mostrado con más claridad la lógica detrás de estas expresiones radicales: ‘la resistencia surge no solo de la apropiación material sino de la sistemática humillación personal que caracteriza la explotación'”.
- “La violencia se ha canalizado sobre todo contra símbolos del abuso: las cadenas de farmacias, los supermercados, las AFPs, las multi tiendas. Pero es un malestar que problematiza también las lógicas con las que se ha conducido nuestra democracia. ¿Qué demuestra más el fracaso de nuestro Estado democrático: la incapacidad del gobierno de encontrar una salida política llamando a la intervención de militantes y carabineros o el desacato civil frente al toque de queda y la total desinhibición de la ciudadanía frente a la presencia de uniformados en las calles?”.
La supuesta inevitabilidad de la violencia. En el capítulo “El octubre chileno: ¿el neoliberalismo nace y muere en Chile” planteó que el 18-O era esperable dado el fracaso de la Nueva Mayoría en reformar el sistema imperante.
- Nueva Mayoría y Tribunal Constitucional (TC). “Muchos analistas se preguntaban por qué los chilenos se expresaban de modo tan radical, mediante movilizaciones que incorporaban un alto grado de violencia a sus repertorios de acción colectiva. ¿Qué se podía esperar si los intentos de reforma del sistema en buena parte han naufragado una y otra vez?”, escribió en la página 87.
- “El gobierno de la Nueva Mayoría, coalición de centro izquierda que llevó por segunda vez al gobierno a Bachelet, representó un intento de canalización de la crítica emergida por las movilizaciones del 2011, pero la mayor parte de su agenda transformadora fracasó; en parte por el boicot interno de partidos como la Democracia Cristiana”.
- “Pero, sobre todo, por el veto empresarial y el candado del Tribunal Constitucional, lo que ha hecho inútiles las mayorías parlamentarias, pues aunque se logren aprobar leyes transformadoras, el TC funcionará contra mayoritariamente declarándolas inconstitucionales”.
Su expectativa refundacional con Boric y la nueva Constitución. “El triunfo de Gabriel Boric, el presidente más joven y más votado de la historia del país, representa una oportunidad única para refundar un proyecto de izquierda que permita responder creativamente a los desafíos aquí enunciados”, escribió en la introducción.
- “El proceso constituyente podría contribuir a refundar la relación entre actores sociales, sistema político y Estado. Chile se jugará mucho con la presencia de Boric y con la Nueva Constitución”.
- “De no ser exitosos, existe un alto riesgo de una restauración conservadora que termine por descomponer definitivamente la capacidad institucional del sistema político chileno de responder a futuras crisis”.