El encaje es un fondo que las administradoras acumulan para reflejar el 1% de los recursos de los trabajadores. Analistas plantean si acaso es conveniente eliminarlo o modificarlo.
Fin del encaje. El subsecretario de Previsión Social, Christian Larraín, inició una ronda de conversaciones con las bancadas de diputados de distintos partidos para anticipar algunos de los elementos centrales de la propuesta de Reforma Previsional que prepara el Gobierno.
- El martes fue el turno de RN. El diputado Frank Sauerbaum comentó ese día a Ex-Ante que uno de los elementos que más le llamaron la atención es que el Ejecutivo habla del fin del encaje de las AFP. Entre los motivos está que como habría una gran entidad estatal (desaparecerían las AFP como se le conocen hoy), no tendría sentido mantener el encaje.
- La entidad estatal se encargaría del futuro flujo de las cotizaciones del 10% (tras lo cual las personas podrían elegir quién gestiona su dinero) y del stock de la nueva cotización del 6%, entre otras medidas más conocidas.
- El subsecretario ha planteado que el Gobierno está “escuchando todas las propuestas, y en su mérito evaluarlas con el objetivo de llegar al mayor consenso posible”.
- Ex-Ante consultó a la Subsecretaría de Previsión Social sobre los argumentos para eliminar el encaje, pero desde esa repartición no hicieron comentarios.
- Tampoco hubo respuesta desde la Asociación de AFP.
Qué es. El encaje es un fondo mediante el cual las AFP debe contribuir, con su patrimonio, hasta alcanzar el equivalente al 1% de los fondos previsionales que ellas administran de sus afiliados.
- Se trata de una reserva o depósito de garantía, cuya principal razón de ser es responder por una rentabilidad mínima. Es decir, cada AFP tiene ahí un capital que no puede mover salvo si tiene que recurrir a él para solventar pérdidas de rentabilidad, lo que se calcula con determinados parámetros.
- El encaje se invierte en cuotas por cada multifondo, su evaluación es diaria y tiene su propia normativa de funcionamiento.
- Su uso ha sido escaso, “dado que las rentabilidades de cada AFP no se alejan del promedio para cada tipo de fondo”, dice Ciedess a Ex-Ante.
- En cambio, el incentivo del encaje está en que busca alinear los intereses de las AFP en tanto empresas, con el de los afiliados cuyos fondos gestiona.
- El problema con el encaje es que “ha significado una barrera a la entrada de nuevos actores, los cuales deben constituir con recursos propios una espalda robusta para hacer frente a las responsabilidades establecidas”, complementa Ciedess.
Caída. Los retiros previsionales significaron la salida de unos US$ 52 mil millones de los activos que hasta entonces había en los fondos de pensiones de los chilenos.
- Debido a que disminuyó el stock de fondos previsionales, el 1% del encaje también se redujo en términos brutos (el 1% es una proporción de los fondos previsionales que existan). Es decir, las AFP quedaron con más recursos disponibles para repartir como dividendo a sus accionistas.
¿Conviene su eliminación? Entre las primeras investigaciones académicas que cuestionaron la existencia del encaje está una de José Luis Ruiz y Francisco Bravo. En “Herding Behavior and Default in Funded Pension Schemes: The Chilean Case”, de 2015, los autores sostienen que el encaje genera un comportamiento “manada” de las gestoras y que la reserva está “sobrefinanciada”.
- Ruiz cuenta a Ex-Ante que esas conclusiones se mantienen. Fue uno de los motivos por los cuales en la propuesta de reforma previsional de octubre de 2018, con Sebastián Piñera, se planteó la reducción del encaje desde 1% a 0,5%. En ese minuto, algunas AFP consideraban también que el monto era excesivo, pero otras voces comentaban que era bueno para mantener alineados los incentivos entre administradoras y afiliados. La Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados terminó rechazando la idea de bajar a la mitad del encaje.
- Hay otros mecanismos mejores para alinear los incentivos, comenta el académico. Por ejemplo, como sucede en Fondos Mutuos: se cobran comisiones más altas por un mejor retorno.
- “Una eventual modificación podría vincularse a reducciones en su monto o establecer una proporción acorde al riesgo de cada fondo (mayor proporción para los más riesgosos)”, propone Ciedess.
- Pero si se concretara la eliminación del encaje, “si bien ello podría facilitar la entrada de nuevos actores y el aumento en la competencia del sistema; es importante ponderar los riesgos de desalineación de incentivos, desviaciones significativas de rentabilidad o el ingreso de administradores sin el respaldo financiero suficiente”, agrega la corporación especializada en análisis del sistema previsional.
Un incentivo fiscal. José Luis Ruiz agrega que hay otro buen motivo para eliminar el encaje, y sobre muy necesario para Hacienda: el pago de impuestos.
- Dado que las AFP –o como se terminen llamando– podrían liquidar esos activos, deberán pagar el impuesto a la ganancia de capital, estima Ruiz. “Es una recaudación tributaria importante”, comenta.
- Pero hay un lado B. Aquello que no se vaya a impuestos se repartirá entre los dueños. Cuando estaban controladas por chilenos, esos fondos se quedaban en el país disponibles para invertir en el mercado de capitales local; ahora que la propiedad de la mayoría está en manos de extranjeros, esos dineros podrían salir del país. Capital es de la colombiana Sura, Cuprum de la norteamericana Principal, Provida de la norteamericana Metlife, y PlanVital de la italiana Generali. Habitat es semicontrolada en 40% por Prudential (EE. UU.). Solo Modelo (familia Navarro) y Uno (Ignacio Álvarez) tienen controladores 100% locales.